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25 de diciembre de 2023

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo

Tres textos bíblicos nos ayudan a desentrañar los detalles que nos muestra el hermoso vitral que ilustra nuestra entrada de hoy, en el día de Navidad.


«José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David, para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.

Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre; y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el albergue».

(Lc 2, 4-7)

...

«En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la noche. (...) Los pastores se decían unos a otros: «Vayamos a Belén, y veamos lo que ha sucedido y que el Señor nos ha anunciado». Fueron rápidamente y encontraron a María, a José, y al recién nacido acostado en el pesebre».

(Lc 2, 8. 15-16)

...

«El buey conoce a su amo y el asno, el pesebre de su dueño».

(Is 1, 3)


Tomé la foto en cotubre de 2021 en la Catedral de Mercedes.

25 de diciembre de 2021

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo


 

Pasados innumerables siglos desde de la creación del mundo,

cuando en el principio Dios creó el cielo y la tierra 

y formó al hombre a su imagen; 

después también de muchos siglos, 

desde que el Altísimo pusiera su arco en las nubes tras el diluvio 

como signo de alianza y de paz; 

veintiún siglos después de la emigración de Abrahán, 

nuestro padre en la fe,  de Ur de Caldea; 

trece siglos después

de la salida del pueblo de Israel de Egipto bajo la guía de Moisés;

cerca de mil años después de que David fue ungido como rey,

en la semana sesenta y cinco según la profecía de Daniel; 

en la Olimpíada ciento noventa y cuatro, 

el año setecientos cincuenta y dos de la fundación de la Urbe, 

el año cuarenta y dos 

del imperio de César Octavio Augusto; 

estando todo el orbe en paz,

Jesucristo, Dios eterno

e Hijo del eterno Padre, 

queriendo consagrar el mundo 

con su piadosísima venida, 

concebido del Espíritu Santo, 

nueve meses después de su concepción, 

nace en Belén de Judea, hecho hombre, 

de María Virgen: 

la Natividad de nuestro Señor Jesucristo según la carne.


Con estas palabras presenta el Martirologio Romano la solemnidad de hoy. No hace falta agregar más; sólo presentar las imágenes: son fotos que tomé en 2019 en la Basílica de Nuestra Señora del Socorro.

25 de diciembre de 2020

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo



Para celebrar el Nacimiento del Señor, hemos elegido una imagen que representa al Niño Jesús en su advocación de Aracoeli.

En la basílica conocida popularmente como de San Francisco en la ciudad de Salta se conserva una réplica de esa famosa imagen, cuyo original (una hermosa talla en madera de olivo, del siglo XV) se veneraba en la iglesia romana de Santa María de Aracoeli hasta que fue robada en 1994.


La imagen que se venera en el templo salteño fue bendecida por San Juan Pablo II en 1996, como lo atestigua esta imagen, que se exhibe allí mismo junto a la figura del Niño Jesús.


Antífona de entrada de la Misa del Día del 25 de diciembre (Cf. Is 9, 1.5):

Un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado;

la soberanía reposa sobre sus hombros,

y su nombre será Consejero admirable.


Próxima entrada: 29 de diciembre (Día V de la Infraoctava de Navidad)

25 de diciembre de 2019

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo



«Dios se ha hecho uno de nosotros para que podamos estar con él, para que podamos llegar a ser semejantes a él. Ha elegido como signo suyo al Niño en el pesebre: él es así. De este modo aprendemos a conocerlo. Y en todo niño resplandece algún destello de aquel “hoy”, de la cercanía de Dios que debemos amar y a la cual hemos de someternos; en todo niño, también en el que aún no ha nacido». 

«En aquel Niño acostado en el pesebre Dios muestra su gloria: la gloria del amor, que se da a sí mismo como don y se priva de toda grandeza para conducirnos por el camino del amor. La luz de Belén nunca se ha apagado. Ha iluminado hombre y mujeres a lo largo de los siglos, “los ha envuelto en su luz”. Donde ha brotado la fe en aquel Niño, ha florecido también la caridad: la bondad hacia los demás, la atención solícita a los débiles y los que sufren, la gracia del perdón. Desde de Belén una estela de luz, de amor y de verdad impregna los siglos. Si nos fijamos en los santos (...), vemos esta corriente de bondad, este camino de luz que se inflama siempre de nuevo en el misterio de Belén, en el Dios que se ha hecho Niño. Contra la violencia de este mundo Dios opone, en ese Niño, su bondad y nos llama a seguir al Niño. 

« (...) El verdadero misterio de la Navidad es el resplandor interior que viene de este Niño. Dejemos que este resplandor interior llegue a nosotros, que se encienda en nuestro corazón la llamita de la bondad de Dios; llevemos todos, con nuestro amor, la luz al mundo. No permitamos que esta llama luminosa, encendida en la fe, se apague por las corrientes frías de nuestro tiempo. Custodiémosla fielmente y ofrezcámosla a los demás». 

(Fragmentos de la homilía de Su Santidad Benedicto XVI 
en la primera Misa de Nochebuena de su pontificado,
24 de diciembre de 2005)


La bonita imagen del "Niño de las Navidades" se venera en la Santa Casa de Ejercicios. 
Tomé la foto en julio de 2018.

25 de diciembre de 2017

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo




Un hermoso pesebre artesanal que se exhibe en la iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes (sobre la calle Echeverría) ilustra la entrada de hoy, día de la Navidad del Señor. Añadimos bajo estas líneas los textos bíblicos (de los Evangelios de Lucas y de Mateo) que muestran la presencia de los distintos personajes en el pesebre


José y  María:

En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto, ordenando que se realizara un censo en todo el mundo. Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria. Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen.
José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David, para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada. 

El Niño:

Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre;  y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el albergue.

Los pastores:

En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la noche.  De pronto, se les apareció el Angel del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz. Ellos sintieron un gran temor,  pero el Angel les dijo: «No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo:  Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor.  Y esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y acostado en un pesebre».

Los ángeles:

Y junto con el Angel, apareció de pronto una multitud del ejército celestial, que alababa a Dios, diciendo:  ¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra, paz a los hombres amados por él».

Después que los ángeles volvieron al cielo, los pastores se decían unos a otros: «Vayamos a Belén, y veamos lo que ha sucedido y que el Señor nos ha anunciado». Fueron rápidamente y encontraron a María, a José, y al recién nacido acostado en el pesebre.  Al verlo, contaron lo que habían oído decir sobre este niño,  y todos los que los escuchaban quedaron admirados de que decían los pastores.

Los Magos:

Después de oír al rey, los Magos partieron. La estrella que habían visto en Oriente los precedía, hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el niño.

Cuando vieron la estrella se llenaron de alegría,  y al entrar en la casa, encontraron al niño con María, su madre, y postrándose, le rindieron homenaje. Luego, abriendo sus cofres, le ofrecieron dones, oro, incienso y mirra.

Próxima entrada: 29 de diciembre (Santo Tomás Becket)

25 de diciembre de 2016

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo

Visité la Basílica de la Inmaculada Concepción de la ciudad de Concepción del Uruguay hacia el final del tiempo navideño del año pasado, y por ello tuve ocasión de apreciar, justo antes de que lo desarmaran, el hermoso pesebre que ilustra la entrada de hoy.


Oración Postcomunión:

Dios misericordioso,
hoy nos ha nacido el Salvador del mundo;
te pedimos que así como nos ha hecho hijos tuyos,
también nos haga partícipes de su inmortalidad.
Que vive y reina por los siglos de los siglos.


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24 de diciembre de 2015

25 de diciembre: Solemnidad de la Natividad de nuestro Señor Jesucristo


Un hermoso vitral representando el Nacimiento de Jesús, que celebramos hoy. Está ubicado sobre uno de los laterales de la Basílica del Espíritu Santo de la Parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, en Palermo. En la parte inferior de la vidriera, justamente, se ve a la Virgen de Guadalupe.  

¡Feliz Navidad para todos!

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