Hoy recordamos a San Enrique II, de cuya muerte se cumplen hoy exactamente 1000 años. Así es elogiado en el Martirologio:
«San Enrique, emperador romano-germánico, que, según la tradición, de acuerdo con su esposa Cunegunda puso gran empeño en reformar la vida de la Iglesia y en propagar la fe en Cristo por toda Europa, donde, movido por un celo misionero, instituyó numerosas sedes episcopales y fundó monasterios. Murió en este día en Grona, cerca de Göttingen, en Franconia».
Enrique II nació en el año 972. En 995 sucedió en el gobierno del ducado a su padre, que llevaba su mismo nombre y era Duque de Baviera.
San Enrique estuvo casado con Santa Cunegunda, pero no tuvieron hijos. En 1002, a la muerte de su primo Otón III, fue elegido emperador. Fue coronado por Benedicto VIII. Murió en 1024 y fue canonizado en 1146 por Eugenio III.
La hermosa imagen que vemos se venera en la iglesia Santa Felicitas.
Oración Colecta:
Oh Dios, que has llevado a San Enrique, movido por la generosidad de tu gracia, a la contemplación de las cosas eternas desde las preocupaciones del gobierno temporal, concédenos, por sus ruegos, caminar hacia ti con sencillez de corazón en medio de las vicisitudes de este mundo.