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15 de marzo de 2025

15 de marzo: San Artémides Zatti


Nos ocupamos de Artémides Zatti dos veces: en 2017 y en 2021. Pero esta es la primera vez que lo honramos como santo, ya que fue canonizado el 9 de octubre de 2022. En esa ocasión dijo el Papa Francisco I: 

«El hermano salesiano Artémides Zatti, con su bicicleta, fue un ejemplo vivo de gratitud. Curado de la tuberculosis, dedicó toda su vida a saciar las necesidades de los demás, a cuidar a los enfermos con amor y ternura. Se dice que lo vieron cargarse sobre la espalda el cadáver de uno de sus pacientes. Lleno de gratitud por lo que había recibido, quiso manifestar su acción de gracias asumiendo las heridas de los demás». 


El afiche con la imagen Artémides Zatti, que alude a su canonización,  se encontraba en agosto de 2023 en el frente de la Casa Salesiana Nuestra Señora de los Remedios, ubicada junto a la iglesia porteña homónima.

15 de marzo de 2021

15 de marzo: Beato Artémides Zatti

En el museo anexo a la Basílica de San Diego de Alcalá (más conocida por el nombre de San Francisco), en la ciudad de Salta, se exhibe esta medalla que reproduce la imagen del Beato Artémides Zatti.



Nacido el 12 de octubre de 1880 en una humilde familia en la población italiana de Boretto, con ella emigró a Bahía Blanca en 1897. Contrajo tuberculosis, lo que le impedía ser religioso como quería. Pero tras una promesa a la Virgen María quedó curado, pudo terminar su noviciado en la Congregación Salesiana y profesar como coadjutor en 1908. Fue destinado al Hospital de San José, de Viedma, a cargo de los salesianos; allí fue encargado de la farmacia, enfermero, administrador y vicedirector. Su acción benéfica se extendió también a los enfermos y necesitados de los alrededores. Se movía en bicicleta, visitando a los enfermos -no sólo los de su hospital-  sin importar el horario,  la distancia, el viento o el frío patagónico. Lleno de méritos y rodeado de fama de santidad, murió el 15 de marzo de 1951.  Fue beatificado el 14 de abril de 2002 por Juan Pablo II.

13 de noviembre de 2017

13 de noviembre: Beato Artémides Zatti

Aunque la Memoria del Beato Artémides Zatti figura el 15 de marzo en el Martirologio,  en la Argentina se la celebra el 13 de noviembre.

"Artémides Zatti nació en Boretto (Reggio Emilia) el 12 de octubre de 1880. (...) A a los nueve años ya se ganaba el jornal como peón. Obligada por la pobreza, la familia Zatti, a principios del 1897, emigró a Argentina y se estableció en Bahía Blanca. El joven Artémides comenzó enseguida a frecuentar la parroquia dirigida por los Salesianos, encontrando en el párroco don Carlos Cavalli, hombre piadoso y de extraordinaria bondad, su director espiritual. Fue éste quien lo orientó hacia la vida salesiana. Tenía 20 años cuando entró en el aspirantado de Bernal".



Asistiendo a un joven sacerdote enfermo de tuberculosis, contrajo esa enfermedad. Entonces fue trasladado a Viedma en busca de clima más propicio; allí había además un hospital en el que trabajaba un estupendo enfermero salesiano que hacía prácticamente de médico: el padre P. Evasio Garrone. El sacerdote invitó a Artémides a rezarle a María Auxiliadora para obtener la curación, sugiriéndole lo siguiente: «Si Ella me cura, tú te dedicarás toda la vida a estos enfermos». "Artémides hizo de buen gusto tal promesa; y se curó misteriosamente. Más tarde dirá «Creí, prometí, curé». Estaba ya trazado su camino con claridad y él lo comenzó con entusiasmo. Aceptó con humildad y docilidad el no pequeño sufrimiento de renunciar al sacerdocio". Emitió votos como hermano coadjutor en 1908 e hizo la Profesión Perpetua en 1911. "Coherente con la promesa hecha a la Virgen, se consagró inmediata y totalmente al Hospital, ocupándose en un primer momento de la farmacia aneja, pero después, cuando en 1913 murió el P. Garrone, toda la responsabilidad del hospital cayó sobre sus espaldas". Cumplió tareas de vicedirector, administrador, y sobre todo diestro enfermero, apreciado por todos los enfermos y por todo el personal sanitario.

"Su servicio no se limitaba al hospital sino que se extendía a toda la ciudad, y hasta a las dos localidades situadas en las orillas del Río Negro: Viedma y Patagones. En caso de necesidad se movía a cualquier hora del día y de la noche, sin preocuparse del tiempo, llegando a los tugurios de la periferia y haciéndolo todo gratuitamente. Su fama de enfermero santo se propagó por todo el Sur y de toda la Patagonia le llegaban enfermos. No era raro el caso de enfermos que preferían la visita del enfermero santo a la de los médicos".




"Artémides Zatti amó a sus enfermos de manera verdaderamente conmovedora. Veía en ellos a Jesús mismo"; por ejemplo, cuando les pedía ropa a las hermanas  para un muchacho recién llegado, decía: «Hermana, ¿tiene ropa para un Jesús de 12 años?». "La atención hacia sus enfermos alcanzaba rasgos muy delicados. (...) Fiel al espíritu salesiano y al lema dejado como herencia por D. Bosco a sus hijos – «trabajo y templanza» – desarrolló una actividad prodigiosa con habitual prontitud de ánimo, con heroico espíritu de sacrificio, con despego absoluto de toda satisfacción personal, sin tomarse nunca vacaciones ni reposo. Hay quien ha dicho que sus únicos cinco días de descanso fueron los que transcurrió... ¡en la cárcel! Sí, conoció también la prisión por la fuga de un preso recogido en el Hospital",  fuga que quisieron atribuirle. Pero fue absuelto y su vuelta a casa fue triunfal.

"Fue hombre de fácil relación humana, con una visible carga de simpatía, alegre cuando podía entretenerse con la gente humilde. Pero sobre todo, fue un hombre de Dios". Artémides  irradiaba a Dios. "Un médico más bien incrédulo del Hospital, decía: «Cuando veía al señor Zatti, vacilaba mi incredulidad». Y otro: «Creo en Dios desde que conozco al señor Zatti»".



"En 1950 el infatigable enfermero cayó de una escalera y fue en esa ocasión cuando se manifestaron los síntomas de un cáncer que él mismo lúcidamente diagnosticó. Continuó sin embargo cuidando de su misión todavía un año más, hasta que tras sufrimientos heroicamente aceptados, se apagó el 15 de marzo de 1951 con total conocimiento, rodeado del afecto y del agradecimiento de toda la población".

Hemos seguido la biografía publicada en el sitio web del vaticano con motivo de su beatificación, celebrada en 2002; los párrafos entrecomillados y en cursiva son textuales. Las tres fotografías fueron tomadas en la Basílica de María Auxiliadora y San Carlos.