29 de octubre de 2022

Santa María "en sábado"

En la Basílica del Santísimo Sacramento de la ciudad uruguaya de Colonia se venera esta imagen de la Virgen de la Majestad y Niño Rey, una bella talla portuguesa del siglo XVIII.



«Junto con toda la Iglesia, confieso y proclamo que Jesucristo es en este misterio el único mediador entre Dios y los hombres; pues su encarnación ha traído la redención y justificación a los hijos de Adán, sometidos al poder del pecado y de la muerte. Pero al mismo tiempo estoy plenamente convencido de que nadie ha sido incorporado de una manera tan profunda como Tú, la Madre del Redentor, a este misterio divino, misterio eficaz y soberano; igualmente estoy convencido también de que nadie se encuentra en mejor situación que Tú, Tú sola, María, para introducirnos en él a nosotros de un modo cada vez más sencillo y claro, a nosotros que lo anunciamos y que participamos incluso de él» (San Juan Pablo II, 18 de noviembre de 1980).

24 de octubre de 2022

24 de octubre: San Luis Guanella

El Martirologio trae hoy la memoria de San Luis Guanella: «En la ciudad de Como, en Italia, san Luis Guanella, presbítero, que fundó la Congregación de los Siervos de la Caridad y también la de las Hijas de Santa María de la Providencia, para atender a las necesidades de los desamparados y afligidos, y procurarles la salvación eterna».

Luis Guanella nació en 1842. Tras una vida fecunda en obras de evangelización y caridad, murió en 1915. Fue beatificado por Pablo VI en 1964, y fue canonizado en 2011.

Dijo el papa Benedicto XVI en la misa de canonización: 

«El testimonio humano y espiritual de san Luis Guanella es para toda la Iglesia un don especial de gracia. Durante su existencia terrena vivió con valentía y determinación el Evangelio de la caridad, el «gran mandamiento» (...). Gracias a la profunda y continua unión con Cristo, en la contemplación de su amor, don Guanella, guiado por la divina Providencia, se hizo compañero y maestro, consuelo y alivio de los más pobres y los más débiles. El amor de Dios animaba en él el deseo del bien para las personas que le habían sido encomendadas, en la realidad de su vida diaria. Prestaba solícita atención al camino de cada uno, respetando sus tiempos de crecimiento y cultivando en el corazón la esperanza de que todo ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios, al gustar la alegría de ser amado por él —Padre de todos—, puede sacar y dar a los demás lo mejor de sí mismo. Hoy queremos alabar y dar gracias al Señor porque en San Luis Guanella nos ha dado un profeta y un apóstol de la caridad. En su testimonio, tan lleno de humanidad y de atención a los últimos, reconocemos un signo luminoso de la presencia y de la acción benéfica de Dios: el Dios (...) que defiende al forastero, a la viuda, al huérfano, al pobre que debe dejar en prenda su manto, su único abrigo para cubrir su cuerpo por la noche (cf. Ex 22, 20-26). Que este nuevo santo de la caridad sea para todos, especialmente para los miembros de las Congregaciones que fundó, un modelo de profunda y fecunda síntesis entre contemplación y acción, como él mismo la vivió y practicó. Toda su historia humana y espiritual la podemos sintetizar en las últimas palabras que pronunció en su lecho de muerte: «In caritate Christi». Es el amor de Cristo lo que ilumina la vida de todo hombre, revelando cómo en la entrega de sí a los demás no se pierde nada, sino que se realiza plenamente nuestra verdadera felicidad. Que San Luis Guanella nos obtenga crecer en la amistad con el Señor para ser en nuestro tiempo portadores de la plenitud del amor de Dios, para promover la vida en todas sus manifestaciones y condiciones, y para hacer que la sociedad humana llegue a ser cada vez más la familia de los hijos de Dios».

La estatua que vemos en la foto está ubicada en la vía pública en Buenos Aires, no lejos de la iglesia del Tránsito de San José, que atienden los sacerdotes de la congregación fundada por San Luis Guanella.

22 de octubre de 2022

Santa María "en sábado"


Hoy se cumplen 100 años de la coronación pontificia de la imagen de Nuestra Señora del Rosario de la Reconquista y Defensa de Buenos Aires. Por ello, le dedicamos a esa histórica advocación esta conmemoración sabatina de la Virgen María.

Leemos en la página oficial de la Orden de Predicadores en la Argentina:

Se conoce el culto a la Virgen del Rosario en Buenos Aires, sobre todo desde la fundación del convento a finales del s. XVI y la instalación de diferentes cofradías y hermandades dedicadas a su nombre. La sagrada imagen de la Virgen del Rosario, con el Niño Jesús en sus brazos, esculpida en madera, ha sufrido varias adecuaciones a lo largo de su historia. Estéticamente, es una joya digna de la devoción y ha sido ataviada con especial cariño por los argentinos. Su culto y su templo, se hallaron en el corazón de las gestas de la Reconquista y Defensa de Buenos Aires en 1806 y 1807, y fueron robustecidos después de la Independencia Argentina.

El templo dominicano, y particularmente mariano, engalanado a lo largo de los siglos por piadosos y agradecidos fieles, fue consagrado en honor de la Bienaventurada Virgen del Santísimo Rosario el 19 de octubre de 1783 y elevado a Basílica Menor Papal el 23 de agosto de 1909. La imagen de la Virgen del Rosario fue coronada el 22 de octubre de 1922 y posteriormente salvada del incendio de 1955 por amigos del convento y fieles devotos. En la actualidad, escoltando la imagen de la Virgen del Rosario, decorando su Camarín, se conservan banderas arrebatadas al Regimiento de Infantería Escocés N° 71, y puestas a sus pies por Liniers. También se exhiben dos emblemas que Belgrano tomó del Ejército realista español.

 


(Pese a que el sitio oficial de los dominicos señala -como dijimos arriba- la fecha del 22 de octubre de 1922 como la de la coronación de la Virgen, el cartel junto a la imagen menciona el día 28 del mismo mes y año)


El mismo sitio de la Orden de Predicadores en la Argentina trae también esta plegaria a la Virgen del Rosario:


“¡Reina del Santísimo Rosario, 

Dueña, Señora y madre !” 

Virgen de nuestros mayores, Tesoro de nuestras tradiciones.  

Protectora de la ciudad 

que salvaste contra los ataques de los enemigos. 

Tú eres la gloria, la alegría y toda la honra 

de nuestros corazones.  

Bendice Madre dulcísima, 

a todos los que te acompañamos como hijos 

y juramos como vasallos.  

Cobija bajo tu manto a la ciudad que fue toda tuya 

y será siempre la “Ilustre y Fiel”; 

ilustre en la integridad de su fe 

y fiel en el cumplimiento de sus santos deberes.  

Bendice a nuestra querida Ciudad de la Santísima Trinidad 

Puerto de Santa María de los Buenos Aires 

que se consagra enteramente a Ti.  

Estrecha sobre tu pecho nuestra bandera Azul y Blanca, 

para que sean siempre inmarcesibles sus triunfos.  

Guíanos para que sea nuestra luz, 

nuestra verdad 

y nuestro camino hacia el eterno triunfo de la gloria.  

Amén.

18 de octubre de 2022

18 de octubre: Fiesta de San Lucas

 

En un mensaje de San Juan Pablo II a un congreso internacional celebrado en Padua sobre San Lucas en octubre de 2000, entre otros conceptos señalaba el Santo Padre:

«Entre las glorias de esa Iglesia, [i.e. la de Padua] es muy significativa la relación particular que la une a la memoria del evangelista San Lucas, cuyas reliquias, según la tradición, conserva en la espléndida basílica de Santa Justina: tesoro precioso y don verdaderamente singular, que ha llegado a través de un camino providencial. En efecto, San Lucas, según antiguos testimonios, murió en Beocia y fue enterrado en Tebas. Desde allí, como refiere San Jerónimo (cf. De viris ill. VI, I), sus huesos fueron transportados a Constantinopla, a la basílica de los Santos Apóstoles. Sucesivamente, según las fuentes que las investigaciones históricas van explorando, fueron trasladados a Padua.

(...)

San Lucas, ministro de la palabra de Dios (cf. Lc 1, 2), nos introduce en el conocimiento de la luz discreta, y al mismo tiempo penetrante, que ella irradia iluminando la realidad y los acontecimientos de la historia. El tema de la palabra de Dios, hilo de oro que atraviesa los dos escritos que componen la obra lucana, unifica también las dos épocas que él contempló: el tiempo de Jesús y el de la Iglesia. Casi narrando la "historia de la palabra de Dios", el relato de San Lucas sigue su difusión desde Tierra Santa hasta los confines del mundo. El camino propuesto por el tercer evangelio está profundamente marcado por la escucha de esta palabra que, como semilla, se ha de acoger con bondad y prontitud de corazón, superando los obstáculos que le impiden echar raíces y dar fruto (cf. Lc 8, 4-15).

Un aspecto importante que San Lucas pone de relieve es el hecho de que la palabra de Dios también crece y se consolida misteriosamente a través del sufrimiento y en un ambiente de oposiciones y persecuciones (cf. Hch 4, 1-31; 5, 17-42; passim). La palabra que San Lucas indica está llamada a transformarse, para cada generación, en un acontecimiento espiritual capaz de renovar la existencia. La vida cristiana, suscitada y sostenida por el Espíritu, es diálogo interpersonal que se funda precisamente en la palabra que nos dirige el Dios vivo, pidiéndonos que la acojamos, sin reservas, en la mente y el corazón. Se trata, en definitiva, de convertirse en discípulos dispuestos a escuchar con sinceridad y disponibilidad al Señor, siguiendo el ejemplo de María de Betania, que "eligió la mejor parte", porque, "sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra" (cf. Lc 10, 38-42)».

La imagen corresponde a la iglesia llamada "Redonda" de Belgrano.

15 de octubre de 2022

15 de octubre: Santa Teresa de Jesús

La capilla del Colegio de Nuestra Señora, en el centro porteño, alberga esta bella imagen de Santa Teresa de Jesús:


El Martirologio Romano le dedica este elogio:

«Memoria de Santa Teresa de Jesús, virgen y doctora de la Iglesia, que nacida en Ávila, ciudad de España, y agregada a la Orden de los Carmelitas, llegó a ser madre y maestra de una observancia más estrecha, y en su corazón concibió un plan de crecimiento espiritual bajo la forma de una ascensión por grados del alma hacia Dios, pero a causa de la reforma de su Orden hubo de sufrir dificultades, que superó con ánimo esforzado, y compuso libros en los que muestra una sólida doctrina y el fruto de su experiencia (1582)».

Parte de esa «sólida doctrina», «fruto de su experiencia»,  aparece reflejada en la imagen que acabamos de ver, pues la santa de Ávila sostiene un libro con esta frase:


«El mérito consiste en obrar, sufrir 
y amar a Dios».

12 de octubre de 2022

12 de octubre: Beato Carlo Acutis

Hoy, 12 de octubre, celebramos la memoria del Beato Carlo Acutis, beatificado en 2020. «Su vida -dijo el Cardenal Agostino Vallini en la homilía de la misa de beatificación, celebrada en Asís- es un modelo, particularmente para los jóvenes, para no encontrar justificaciones no solo en los éxitos efímeros, sino en los valores perennes que Jesús sugiere en el Evangelio, es decir, para poner a Dios en primer lugar en las grandes y pequeñas circunstancias de la vida, y para servir a los hermanos, especialmente a los últimos».

Transcribimos la biografía publicada por Aciprensa, junto con una foto, que tomamos en octubre de 2021 en la iglesia de Santa María, sobre avenida La Plata:

Carlo Acutis nació el 3 de mayo de 1991 en Londres (Inglaterra), ciudad donde en aquel momento trabajaban sus padres, Andrea Acutis y Antonia Salzano, ambos italianos. Meses después de su nacimiento, los padres de Carlo decidieron regresar a Italia y se mudaron con él a Milán. Desde muy pequeño, Carlo evidenció un cariño especial por Dios y una sensibilidad muy peculiar para aprender y conocer las cosas relativas a la fe, a pesar de que sus padres no eran particularmente devotos en ese entonces. Aquel amor por el Señor no pararía de crecer y se fortalecería aún más en su adolescencia, cuando a Carlo le diagnosticaron leucemia mieloide aguda. En ese momento, lejos de desesperar, Carlo manifestó su voluntad de ofrecer sus sufrimientos “por el Señor, el Papa y la Iglesia”. Ese deseo, que revelaba una profunda madurez espiritual a sus cortos 15 años, era expresión de un corazón que fue tomando precozmente la forma del Corazón de Cristo.

Son abundantes los testimonios sobre la alegría de Carlo, su fortaleza, su preocupación por el bien de los que le rodeaban, su sensibilidad y empatía para con sus compañeros de colegio -especialmente si eran maltratados-, o con los pobres, a quienes asistió en numerosas ocasiones junto a sus amigos. A muchos les llamaba la atención la naturalidad con la que Carlo se acercaba a los enfermos, a los pobres o a quien estuviese sufriendo, como asegurándose siempre de que Dios estuviera en sus vidas, y sea su amor el que los alivie material y espiritualmente.

A Carlo Acutis lo han llamado “ciberapóstol de la Eucaristía”, “apóstol de los millennials” y, más recientemente, “apóstol de la Internet”; y es que hay razones suficientes para ello: Carlo fue un promotor y divulgador de los milagros eucarísticos en el ciberespacio. Una de las cosas más interesantes que hizo fue diseñar un sitio web con ese fin. Allí escribió: “Mientras más frecuente sea nuestra recepción de la Eucaristía, más seremos como Jesús. Y en esta tierra podremos pregustar el Cielo”. Es claro que sus palabras revelan la sana comprensión que tenía de las nuevas tecnologías y su utilidad en la evangelización. Se dice también que gustaba de los videojuegos y que incluso tuvo una consola PlayStation 2, la que por decisión propia solo usaba los domingos durante una hora.

Sabemos que todo santo es hijo de su tiempo, aunque simultáneamente capaz de cuestionar las condiciones propias del momento en el que vive. En ese sentido, cualquier cosa que pueda decirse de Carlo Acutis solo puede entenderse bajo ese principio. Vivió como un chico común de finales del siglo XX -paseaba, jugaba, estudiaba, ayudaba en casa, se divertía con amigos y familiares- pero no se limitó a eso; Carlo escogió la ruta hacia lo eterno, la parte mejor, sin dejarse llevar por la corriente en contra.

Carlo tuvo un trato frecuente con la Eucaristía -en la oración frente al Santísimo Sacramento y en la comunión frecuente- y una hermosa relación con la Virgen María. Carlo iba a misa varias veces por semana y amaba rezar el Rosario todos los días. Fue un joven forjado en la oración que no se perdió en el “bullicio” del mundo de hoy. Constantemente decía: “La Eucaristía es mi autopista al Cielo”.

Carlo murió el 12 de octubre de 2006, día de la Virgen del Pilar. Fue sepultado en Asís, por pedido suyo, debido al gran amor que le tenía a San Francisco. Su causa de beatificación se abrió en 2013. Fue declarado “Venerable” en 2018 y desde el 10 de octubre de 2020, se cuenta entre los beatos.

El milagro que hizo posible su beatificación sucedió en Brasil. Gracias a su intercesión, un niño resultó curado de una grave enfermedad. El niño del milagro reconocido se llama Matheus. Él padecía una malformación congénita conocida como páncreas anular, condición que impide la correcta ingesta y digestión de los alimentos, entorpece la nutrición y atrofia el crecimiento de una persona, causándole además numerosos malestares. La madre de Matheus tuvo noticia de Carlo Acutis a través de un sacerdote amigo y se dedicó a pedir su intercesión por la curación de su hijo. El milagro tuvo lugar después de que Matheus venerara una de las reliquias del nuevo Beato.

10 de octubre de 2022

10 de octubre: Santo Tomás de Villanueva

 


Santo Tomás de Villanueva aparece en el Martirologio el 8 de septiembre, día de su muerte; sin embargo en España y entre los agustinos se  lo honra en la fecha de hoy.

El célebre Obispo de Valencia se destacó, sobre todo, por sus obras de caridad hacia los necesitados. «Su ardiente caridad para con los pobres y la clases sociales más desvalidas le ha merecido el título de "limosnero de Dios"», leemos en un sitio oficial de los agustinos recoletos.  El 10 de octubre de 2016 mostramos aquí un vitral que lo representaba "dando limosna" en la iglesia porteña de san Agustín; hoy, en un vitral del templo de Nuestra Señora de la Consolación, la imagen es similar. 

8 de octubre de 2022

8 de octubre: Santa Brígida de Suecia



En un altar lateral del templo parroquial de Capilla del Señor se venera esta imagen de Santa Brígida de Suecia, indicándose en el cartel adjunto que la fecha de su memoria es hoy, 8 de octubre.

Se trata de la fecha tradicional de la santa, si bien en la última y muy reciente reforma del Martirologio Romano figura inscripta el 23 de julio, día de su muerte, en que la hemos honrado en una ocasión en el año 2019.


Ubicada en el retablo junto a San Patricio y San Malaquías, apóstoles de Irlanda, confesamos que estamos tentados de suponer que en realidad podría tratarse  de Santa Brígida de Kildare, de quien dice en Martirologio que, «según se cuenta, continuó el trabajo de evangelización iniciado por San Patricio». Además, toda la zona en que está ubicada Capilla del Señor fue evangelizada por misioneros irlandeses, como hemos visto en otras entradas (en templos de Luján y Mercedes) y puede apreciarse también en los templos de San Antonio de Areco y de San Andrés de Giles


El patronazgo sobre los tamberos también resultaría más apropiado para Santa Brígida de Irlanda, ya que hay antiguas tallas e  imágenes de la santa acompañada de una vaca o ejecutando  tareas de ordeñe.

Sin embargo, nos sometemos a la información "oficial" que proporciona el cartelito del templo, que, dicho sea de paso, hoy visitamos por primera vez en este blog.

4 de octubre de 2022

4 de octubre: San Francisco de Asís

 


«Tres ordines hic ordinat»: tal el texto que se lee en la página izquierda del libro que sostiene, abierto, San Francisco de Asís en la imagen que contemplamos hoy, que se encuentra en la iglesia porteña de Monserrat.

En efecto, «San Francisco fundó tres órdenes, pues se lee en el Oficio del 4 de octubre: "Tres ordines hic ordinat: primumque Fratrum nominat Minorum: pauperumque fit Dominarum medius: sed Poenitentium tertius sexum capit utrumque" (Brev. Rom. Serap., in Solem. S.P. Fran., ant. 3, ad Laudes).  Estas tres órdenes -los Frailes Menores, las Hermanas Descalzas y los Hermanos y Hermanas de Penitencia- son generalmente referidas como la Primera, Segunda y Tercera Orden de San Francisco». 

Para completar esta entrada, transcribimos a continuación la Segunda Lectura del Oficio de Lecturas de hoy, tomada de la carta de San Francisco de Asís a todos los fieles

«Puesto que soy siervo de todos, a todos estoy obligado a servir Puesto que soy siervo de todos, a todos estoy obligado a servir y a suministrar las odoríferas palabras de mi Señor; y quiero comunicarles las palabras de nuestro Señor Jesucristo, que es el Verbo del Padre, y las palabras del Espíritu Santo, que son espíritu y vida. 
Siendo este Verbo del Padre sobre manera rico, quiso, junto con la bienaventurada Virgen, su Madre, escoger en el mundo la pobreza. Y puso su voluntad en la voluntad del Padre, diciendo: Padre, hágase tu voluntad; no se haga como yo quiero, sino como quieres tú. 
Y la voluntad de su Padre fue que su bendito y glorioso Hijo, a quien nos dio para nosotros, y que nació por nuestro bien, se ofreciese a sí mismo como sacrificio y hostia, por medio de su propia sangre, en el altar de la cruz; no para sí mismo, por quien todo fue hecho, sino por nuestros pecados, dejándonos ejemplo para que sigamos sus huellas. 
Y quiere que todos seamos salvos por él y que lo recibamos con un corazón puro y con nuestro cuerpo casto. ¡Oh, cuán dichosos y benditos son los que aman a Dios y obran como dice el Señor mismo en el Evangelio: Amarás al Señor tu Dios con todo el corazón y con toda la mente, y a tu prójimo como a ti mismo! 
Amemos, pues, a Dios y adorémoslo con puro corazón y mente pura, porque esto es lo que sobre todo desea cuando dice: Los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y verdad. Porque todos los que lo adoran, es preciso que lo adoren en espíritu de verdad. Y dirijámosle alabanzas y oraciones día y noche, diciendo: Padre nuestro, que estás en los cielos, porque es preciso oremos siempre y no desfallezcamos. 
Y de manera especial los religiosos, que renunciaron al siglo, están obligados a hacer más y mayores cosas, pero sin omitir éstas. No debemos ser sabios y prudentes según la carne, sino, más bien, sencillos, humildes y puros. 
Yo, hermano Francisco, vuestro menor siervo, os ruego y suplico, en la caridad, que es Dios, y con el deseo de besaros los pies, que os sintáis obligados a acoger, poner por obra y guardar con humildad y amor estas palabras y las demás de nuestro Señor Jesucristo. Y a todos aquellos y aquellas que las acojan benignamente, las entiendan y las envíen a otros para ejemplo, si perseveran en ellas hasta el fin, bendíganles el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amén».

1 de octubre de 2022

1° de octubre: Patrocinio de la Santísima Madre de Dios

La fiesta de hoy corresponde al Rito Bizantino. La Catedral de la eparquía de Rito Bizantino-Ucraniano de Buenos Aires está puesta bajo la advocación del Patrocinio de la Virgen ("Pokrov") y por tanto hoy es su fiesta titular; en ese bello templo catedralicio tomamos en noviembre del año pasado las fotos de esta entrada. La información procede de una fuente oficial: el sitio del Instituto San Basilio Magno.


«La fiesta del Pokrov tiene su origen en la aparición de la Virgen María en Constantinopla, en la iglesia de Blajeme. La Madre de Dios se apareció a San Andrés el Necio y a San Epifanio. La Virgen se arrodilló y llorando rezaba por la salvación de la ciudad. En la visión San Andrés vio a la Virgen con las manos extendidas y a los ángeles que sostenían de ambos extremos un velo sobre su cabeza. La virgen salvó la ciudad de la invasión de los árabes. De este velo que cubría a todos los presentes en la Iglesia, toma el nombre la fiesta Pokrov, que significa cubrir, proteger»


TROPARIO DE LA FIESTA 

Hoy nosotros, tus hijos, iluminados por tu aparición, oh Madre de Dios, con alegría celebrando y venerando tu santo icono, te rogamos: Cúbrenos con tu Santo Patrocinio y líbranos de todo mal, implorando nuestra salvación a Cristo, tu Hijo y Dios nuestro. 

KONDAKIO 

Hoy la Virgen, junto con los coros celestiales, conduce nuestra oración, intercediendo por nosotros junto a Dios. Los ángeles y los sacerdotes se inclinan ante Ella, los Apóstoles con los Profetas se regocijan, porque la Madre de Dios intercede por nosotros ante el Dios Eterno.