En uno de los altares laterales de la Basílica de Luján hay una imagen de un santo ignoto, que no es posible hallar por su nombre en los santorales con los que trabajamos habitualmente. La foto que sigue la tomé en 2016; la subsiguiente (la base con el nombre del santo), en 2018.
Como se desprende de lo que acabo de relatar, ya en 2016 tenía una foto de la imagen de San Querado, pero volví a la Basílica Nacional en 2018 y nuevamente tomé fotografías de la estatua del misterioso santo, como esta que sigue:
Oportunamente investigué acerca de San Querado, quien resulta ser el abad San Ciarano, a quien corresponde esta entrada del Martirologio: «En el monasterio de Clonmacnoise, a orillas del río Shannon, en Hibernia, San Ciarano, presbítero y abad, fundador de dicho cenobio».
Querado o Ciarano (también Querano, Queriano, Kiriano o Kieran) nació «en Irlanda a comienzos del s. VI. Fue educado en los monasterios de Inishmore y Clonard. Fundó con otros compañeros el monasterio de Clonmacnoise, en el que tuvo un gran crédito y fama de santo, y donde murió en el 549» ¹. Se relatan numerosos hechos fabulosos de su vida, anécdotas relacionadas con sus virtudes y relatos de sus milagros.
¹ José Luis Repetto Betes: «Todos los santos - Santos y beatos del Martirologio Romano» (Madrid, BAC, 2007)
Muy interesante este descubrimiento de la imagen de San Ciarán en la Basílica de Lujan.
ResponderEliminarAl leer su biografía, veo su importancia para la antigua Hibernia romana (la actual Irlanda) ya que por muchos siglos el monasterio que fundó este santo (545-548) fue un faro eminente de piedad y cultura que deslumbró a toda Europa.
La explicación de esta escultura del santo irlandés, está en que toda la zona oeste cercana a la urbe porteña fue un lugar de afincamiento de muchísimas familias irlandesas que cultivaron esas feraces tierras con un trabajo admirable. Su religiosidad y su noble estirpe hunde sus raíces en este enclave irlandés.
Huían de la gran hambruna del siglo XIX, y Argentina fue uno de los destinos de esta emigración, con muchos hijos. Y venían también sacerdotes y monjas, formados bajo la cruz celta, con una fe católica firme.
Sólo leer los nombres de los entrañables pueblos de la zona de Lujan-Carmen de Areco -en la línea de las rutas 7-8- nos hablan de su impronta irlandesa: Gouin, Gowland, Carlos Keen, Gahan, Maguire, Todd, Duggan…
Como dato de interés para una visita a las ruinas del Monasterio de Clonmacnoise, vale la pena hojear este sitio: https://www.viajaporlibre.com/blog/irlanda-el-monasterio-de-clonmacnoise/
Muchas gracias
EliminarDetalle que desconocía, muchas veces visite la Basílica de Luján como alumno de los Hermanos Maristas y no repare en ese detalle, gracias!
ResponderEliminarGracias
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