6 de julio de 2020

6 de julio: Santa Florentina

«En Sevilla, en la región hispánica de Andalucía, Santa Florentina, virgen, muy versada en las disciplinas eclesiásticas, a la cual sus hermanos los obispos Isidoro y Leandro dedicaron tratados de insigne doctrina». Con estas palabras el Martirologio Romano hace el elogio de esta santa en su fecha propia, que es el 28 de agosto. Sin embargo, la Patrona del Partido de Campana y Titular de la Catedral de Zárate-Campana es celebrada hoy en la diócesis y en todo el partido, por especial concesión de la Santa Sede. 

Así lo explica un medio local: «En el Santoral Español la celebración de la santa era el día 20 de junio, fecha que coincidía con el Día de la Bandera. El párroco, presbítero Luis Roza, como en ese entonces comenzaba a celebrarse el día de Campana el 6 de julio, fecha de la creación del partido, creyó oportuno unir ambas fechas, la civil y la religiosa en una sola y con la colaboración del obispo Monseñor Antonio Aguirre, se obtuvo del Papa Juan XXIII, el rescrito que se conserva en la parroquia y por el cual se accede que la celebración se traslade en Campana y definitivamente a dicho día».  El 6 de julio, en efecto, es celebrado como la fecha fundacional de la ciudad de Campana, cabecera del partido homónimo y sede del obispado.



Santa Florentina vivió entre los siglos VI y VII en la España visigótica. Nació en Cartagena, en la actual  provincia de Murcia, que era capital de la colonia romana donde, según la tradición, llegó la fe cristiana a la península ibérica por la predicación del Apóstol Santiago. Perseguida por los arrianos, la familia se instaló en Sevilla.

Dice El Testigo Fiel «Hermana de tres obispos españoles en la época de la dominación visigoda (San Leandro, San Isidoro y San Fulgencio), consagró su virginidad a Dios. Era más joven que su hermano Leandro, pero mayores que Isidoro, quien sucedió a Leandro como arzobispo de Sevilla. Antes de su elevación a la dignidad episcopal, Leandro había sido monje, y fue a través de su influencia que Florentina abrazó la vida ascética. Ella se asocia con un grupo de vírgenes, que también deseaban abandonar el mundo, y forma una comunidad religiosa. Fuentes tardías aseguran que su residencia fue el convento de Santa María del Valle, cerca de Écija (Astigis), ciudad de la que su hermano Fulgencio era obispo. En cualquier caso, lo cierto es que ella se había consagrado a Dios antes del año 600, ya que su hermano Leandro -que murió en el 600 o 601- escribió para guiarla un trabajo que se conserva y que trata de la vida de la mujer consagrada y del abandono del mundo».  En esa obra «el autor establece las normas según las cuales las vírgenes consagradas a Dios en clausura deben regular sus vidas (...). Florentina, regulada su vida de acuerdo a los consejos de su hermano, entró con fervor en el espíritu de la vida religiosa, y fue honrada como santa después de su muerte. Su hermano menor, Isidoro, también le dedica una obra».

Añade un sitio local que Florentina fue sepultada en un convento que, años después, durante la invasión árabe, fue destruido. «Sus restos, junto a los de San Fulgencio, fueron rescatados y llevados al norte. Luego de la reconquista fueron encontrados en la Provincia de Cáceres, en un pueblo llamado Berzocanas, próximo al Santuario de Guadalupe, y a la ciudad de Trujillo. En el siglo XIV, las Hermanas Dominicas se hicieron cargo del convento que reedificaron, dedicándolo a Santa Florentina. Las reliquias de la santa fueron distribuidas en las Catedrales de Murcia, Cartagena, Plasencia y en el Monasterio del Escorial».

La devoción a la santa en la localidad de Campana está presente desde los orígenes de la ciudad. Los hermanos Costa, sus fundadores,  donaron en 1875 uno de los ocho terrenos triangulares que rodean la plaza principal, con la condición que se edificara allí una capilla dedicada a Santa Florentina, en recuerdo de su madre, Florentina Ituarte de Costa.

En septiembre de 1885 la obra estaba terminada. Fue bendecida en octubre por el Arzobispo de Buenos Aires. En 1893 fue creada la parroquia de Santa Florentina de Campana. 

En 1976 el Papa Pablo VI erigió la Diócesis de Zárate-Campana mediante la bula “Qui divino consilio”. Por lo tanto, el templo parroquial adquirió la categoría de Catedral.



«La reliquia de la Santa que se conserva y venera en la Catedral, es un pequeño trozo de la rótula que el padre Félix Ferrante consiguió en el convento de Santa Florentina en Ecija, de parte de las mojas dominicas (florentinas) establecidas desde el siglo XIV, cuando construyeron y se establecieron en el edificio que seis siglos antes habían destruido los moros. Está en un precioso relicario en el altar de la capilla del Santísimo Sacramento». 

La imagen de Santa Florentina se destaca en el centro de un gran mural pintado por Raúl Soldi detrás del altar. «El sentido místico que el maestro Soldi dio a Santa Florentina» al pintarla elevándose hacia el cielo, «coincide con la frase al pie del mural»: "Santa Florentina Virgen floreces como el lirio"».  El mural fue una donación del ingeniero Agustín Rocca.

Tomé las fotos en febrero de 2020.

No hay comentarios:

Publicar un comentario